Centro Termal
en Bande
Actuar en el claro, entender el centro termal como un lugar de relajación personal, un refugio en medio del bosque, un oasis.
Uno de los manantiales utilizados por la civilización romana en la brutal expansión de su imperio se encuentra a los márgenes de la Vía Nova, encargada de unir Braga con Astorga. Formando parte seguramente de un complejo mayor todavía por descubrir, “A Cidá”, son las termas de Bande. Seguramente utilizadas como zona de aseo próxima al campamento romano de Aquis Querquennis, un complejo arqueológico de grandes dimensiones.
​
Es aquí donde se proyecta la realización de un Centro Termal, para el aprovechamiento de las aguas termales procedentes del manatial, a las orillas del embalse de as Conchas.
​
De partida nos encontramos con dos condicionantes fundamentales, la línea de máxima inundabilidad y el cauce de policía, que acotan la posición del edificio en la parte superior de la parcela.
​
Una parcela totalmente rodeada de arbolado en todo su perímetro, pero con un claro en su zona central. En su linde Este nos encontramos con la Vía Nova, y en el Sur con el borde del embalse, a escasos metros continuando por el borde del embalse hacia el Oeste tenemos las antiguas termas romanas, no siempre visibles debido a la oscilación del nivel del embalse.
​
Proponemos actuar en el claro, entender el centro termal como un lugar de relajación personal, un refugio en medio del bosque, un oasis. Para ello se ordena el espacio en 2 ejes fundamentales, uno Norte-Sur (Cardo) y otro Este-Oeste (Decumano), desde los ejes se originan los 4 focos generadores del proyecto, encargados de hacer que el edificio forme parte de lo existente, 3 trazos, ser parte del bosque abriéndose al claro.
​
Se levanta sobre un basamento, que lo independiza del paseo peatonal al borde del embalse, una geometría que juega con el usuario, se introduce en el bosque, vuela por encima del paseo como las copas de los árboles, genera diferentes espacios, más cerrados, más abiertos, de paso, de estar,...
​
Como si de una excavación arqueológica se tratase, una malla sirve de base para distribuir el centro termal, mediante la cual se ordenan y distribuyen los espacios. Sobre ella se apoya también la estructura, elementos puntuales y verticales distribuidos bajo la cubierta, como si de una continuidad del bosque se tratase. La propuesta generada como una superposición de órdenes.
​
Se accede desde el lado Oeste a través de una cubierta que se levanta para indicar el acceso, se transcurre por un espacio cubierto entre el bosque y el claro, que te dirige hacia los vestuarios. En esta zona de acceso nos encontramos con la cafetería y zona informativa, de libre acceso para cualquier usuario. La pieza de la recepción nos hará de filtro entre el interior y el exterior.
​
Una vez dentro predomina la circulación longitudinal, que nos deja a un lado la zona de piscinas y en otra la de tratamientos medicinales, saunas, etc.
​
La zona de baño se encuentra totalmente abierta al claro, buscando la mayor entrada de luz posible y diálogo con el exterior. Hacia el bosque una serie de cajas generan aberturas intermitentes hacia la zona arbolada.
​
Distinguimos los principales tipos de piscinas, tepidarium caldarium y frigidarium acompañadas de zonas con piscinas terapéuticas y lúdicas. Todas ellas cuentan con su versión interior y exterior, siendo la elección totalmente libre por el usuario.
Una barrera vegetal en el borde del basamento ayuda a protegerse de las vistas desde el embalse, generando así total intimidad dentro del complejo.
​
Y es que el centro termal pretende hacer formar parte al usuario de su entorno, busca las situaciones intermedias, el estar fuera cubierto por árboles, estar fuera bajo la cubierta, fuera descubierto o totalmente en el interior, pudiendo disfrutar del recorrido termal de una manera lineal o totalmente independiente.
​
En todo momento la edificación queda contenida por encima de la zona de servidumbre, la banda de 5m de ancho desde la cota +549,00m. Por debajo de esta línea se dispone el acceso y el aparcamiento, así como el paseo de borde que genera la conexión con las termas existentes, toda esta plataforma se encuentra por encima de la máxima cota inundable para favorecer su mantenimiento, solo en el punto donde se conecta con las termas existentes la cota disminuye, ya que estas termas se encuentran por debajo de dicho nivel.
​
La propuesta se resuelve mediante muros de mampostería de granito, que se encargan de generar el paseo de borde y el basamento sobre el que se asienta el centro termal. Sobre el basamento las cajas de madera acogerán el programa más privado y servirán junto con los elementos metálicos verticales de soporte a la cubierta vegetal.
​
Tiene una clara versatilidad en cuanto a la distribución de los espacios y piscinas, ya que la modulación y disposición de las piezas permite jugar con la total libertad, intercambiándolas, eliminándolas o pudiendo generar nuevos elementos. De este modo la posible ampliación queda garantizada, pudiendo extenderse el basamento en dirección Oeste y en consecuencia continuar disponiendo piscinas, cabinas, saunas, vestuarios, etc; el crecimiento está asegurado.
​
​​